Pura Elegancia,
Pura Potencia…
Por José Montiel
Desde el mismo momento en que fui convocado por los amigos de Info Auto para la prueba y pude sentarme frente al volante, sabía que lo hacía frente a algo totalmente diferente; desde el ajuste anatómicamente perfecto de sus butacas, hasta la distribución exacta de sus instrumentos. Todo auguraba un disfrutar montado sobre una pieza tecnológica distinta, sobre todo, teniendo en cuenta el hábito desarrollado sobre los autos de fórmula.
Hasta que llegó el ansiado momento de la puesta en marcha y fue apretar el botón de ignición, para que literalmente los 500 caballos de fuerza descargaran todo su sonido – para nosotros celestial – sobre el asfalto.
Por momentos, el brío que produce su potencia insoslayable, lo hace un tanto delicado de manejar en el denso tránsito de las carreteras de Miami. No obstante, es supremamente ágil y se desliza con un silencio realmente sorprendente para su potencia. Pienso que su enorme coeficiente de penetración, la aislación interior de su carrocería y su suspensión, tienen mucho que ver con este detalle. Es decir; el confort ilimitado dentro del vehículo, nos hace pasar por alto el detalle de que estamos sobre un verdadero bólido.
Una vez en el trazado del Homestead-Miami Speedway, la sensación cambiaría dramáticamente…
Allí pudimos comprobar el verdadero poder de una máquina totalmente diseñada para demostrar sus dotes de deportivo.
El auto dobla, frena y se desliza sobre la cinta asfáltica con asombrosa docilidad y su capacidad de maniobra a altas velocidades, sorprende dentro de un habitáculo de lujo superlativo. Pero para poder aclarar un tanto este concepto, diremos que el nuevo “Jag” fue dotado de un poderoso motor de 8 cilindros en V con 5 litros de desplazamiento y que sustentado por una transmisión secuencial inteligente de 6 velocidades, desarrolla 500 HPs. con 502 libras por pie de “torque”, es decir, un balance perfecto en este renglón.
Su aceleración formidable, está en el orden de los 4.2 segundos en el segmento de 0 a 60 MPH (unos 100 KPH) y su velocidad máxima comprobada, está en las 185 MPH (más de 300 KPH), límite al que se llega con rapidez inusitada y donde el comportamiento en todos los sentidos es inapelable, aún en las condiciones más ásperas.
Más allá de la potencia mencionada, su consumo está dentro de los parámetros normales y hasta puede llegar a ser mejor que el de muchos de sus futuros competidores, comprobando un promedio de casi 18 MPG, después de una larga y ardua jornada a la que fue expuesto.
En términos generales, un auto realmente sorprendente y con performances que van más allá de lo imaginado, respaldado lógicamente, por la máxima tecnología del momento.
Su precio se encuentra en el orden de los 132 mil dólares americanos, con todos los opcionales disponibles y muy pronto se verá en las calles norteamericanas para el encanto de ese mercado…
*Nuestra redacción agradece la colaboración del Piloto venezolano José Montiel (F2000) para esta prueba. |
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